viernes, 9 de mayo de 2014

TIEMPO QUE PASA Y PASA




Pasa y pasa el tiempo,
Inútil, abyecto, riendo
Porque no pasa,
Es solo ingenio de hombre
Para confundirse con el viento,
Negar la inmortalidad
Y enamorarse de nuevo.

Hombre que esquiva el roce
Se ciega y se engaña,
No se mancha las manos
Pero se las enmaraña
De limpios manteles,
De ropa de marca
Y llora en las noches
Porque se desengaña.

Nace el hombre sin pedirlo
Crece pidiendo aprender
Y cuando aprende
No era eso lo pedido
Se muere sin haberlo querido
Y sin haber aprendido
A vivir sin querer saberlo.

Debe amar y odia
La codicia le hace infeliz
Y roba,
Casi sin querer ríe
Y cuando lo quiere, llora.
Contradicción de vida
Que le impide amar
Y su amar es fracasar
Por querer poseer
En lugar de dar.

El hombre es un avatar
Siempre buscando cara
Sin espejo al que mirar
Y comprender:
Su alma es la mejor
La elección siempre fallida
Por no quererse enseñar
Como se es de verdad
Sencillo y fiel
A su naturaleza real.

No pasa el tiempo no,
Pasa el hombre su camino
Dejando regueros de hiel,
Donde quiso sembrar miel;
Camino sembrado de espinas
A base de su dolor,
Pues siempre se obceca en pisar
Por donde antes ya se pisó
Sin buscar sendas de vida,
Otras sendas con amor
Sembradas de sencillez
Adornadas de valor
Para mostrarse cual es,
Que nadie confunda nunca
Su naturaleza de dios
Que cada hombre lo es
Si no empecina su alma
En buscarse su traición.

Se traiciona el hombre solo
Cuando pierde la alegría,
Las albas no le sorprenden
Ni tampoco las puestas de sol.
La sonrisa de los niños,
Los abrazos de pasión,
Que dejan de darse por
Los ajetreos del mundo
Las bobadas del rencor
Y el Gran Demonio del mundo
El dinero que partió
La naturaleza del hombre
En sus dos mitades, dos
La que vendería sus hijos
Olvidándose de su amor
Y la que entrega la vida
Aunque luego no le digan ni adiós.